Se utiliza en cada cambio de aceite o puede agregarse al momento de verificar el nivel del mismo. Es ideal para mantener el rendimiento del motor en condiciones óptimas y prevenir el desgaste prematuro de sus componentes.
Este aditivo minimiza la resistencia por fricción, protege contra la corrosión y la acumulación de sedimentos, neutraliza los ácidos de combustión, repone las sustancias activas del aceite que se consumen con el uso y contribuye a la limpieza de los depósitos en los anillos de los pistones.
Apto para motores nafteros y diésel, incluyendo aquellos que funcionan con biocombustibles. Se aplica directamente en el sistema de lubricación del motor.
Prolonga la vida útil del motor, previene el recalentamiento de válvulas y partes móviles, y mejora el rendimiento general del vehículo. Su uso regular contribuye a un mantenimiento más eficiente y económico.